Galactic Nebula

 El día de hoy me he levantado rebelde y vamos a romper las normas para hablar sobre una película externa a los Oscars de este año 2024.

Aunque The Wonderful Story of Henry Sugar (Wes Anderson, 2023) haya sido nominado al mejor cortometraje de ficción en la gala de los Oscars, la undécima película del cineasta tejano Wes Anderson, Asteroid City (Wes Anderson, 2023), no ha resultado nominada a ninguna sección del resto de premios Oscars tras su más que exitoso paso por cines y buena acogida por parte del público. Es por eso que he sentido la llamada del deber y me veré obligado a explicar el por qué Asteroid City debería haber sido reconocida en los premios de la academia este año, pero para empezar, haré una pequeña introducción.

Asteroid City fue escrita por Wes Anderson y Roman Coppola, hijo de Francis Ford Coppola, el cual dirigió El Padrino (Francis Ford Coppola, 1972) y Apocalypse Now (Francis Ford Coppola, 1979); y director de películas como A Glimpse Inside the Mind of Charles Swan III (Roman Coppola, 2012) y CQ (Roman Coppola, 2001).
El elenco de Asteroid City es, como en la mayoría de las películas del director, estelar, e incluye a estrellas como Scarlett Johansson, Jason Schwartzman, Margot Robbie, Adrien Brody, Tom Hanks, Edward Norton, Tilda Swinton, Steve Carrel, Jeff Goldblum, Willem Dafoe, etc.

Para entender los aspectos que hacen que Asteroid City sea una de las mejores películas de 2023 tendríamos que conocer su historia, pero para eso estoy yo, que por algo he querido hablar de ella. 

Nos situamos en la década de los años 50 en la desértica Asteroid City, un “pueblo” remoto de Estados Unidos situado en medio de un desierto. Dentro de Asteroid City los únicos edificios existentes son un pequeño vecindario de bungalows vacacionales, una cafetería, una gasolinera, un mecánico y un observatorio gubernamental para estudiar un meteorito que cayó hace 3.000 años (lo que le da el nombre de Asteroid City). Dentro de la ciudad se celebra una convención de astronomía juvenil a la que acuden un grupo de jóvenes genios y sus familias para recibir unas insignias por sus avances dentro de numerosos campos y a observar las estrellas dentro del cráter a medianoche.
En cuanto a los personajes, nos centramos en un fotógrafo de guerra viudo (Jason Schwartzman) quien, junto con su suegro (Tom Hanks), cuida a sus hijos durante la convención y conoce a una actríz (Scarlet Johansson) que ha ido junto a su hija para visitar la convención; en Woodrow (Jake Ryan), el mayor de los hijos, mientras intenta superar su timidez y hacerse amigo del resto de jóvenes; en el manager del vecindario (Steve Carrel) que por fín tendrá una oportunidad de negocios para sacar provecho de los bungalows; y en la Doctora Hickenlooper (Tilda Swinton) mientras investiga el pequeño trozo de meteorito que quedó del impacto.
Es aquí cuando, mientras todos los personajes observan las estrellas, un alienígena (animado mediante la técnica de stop-motion) ilumina con una luz verde el cráter para bajar, ante el asombro de todo el mundo, y robar el pequeño trozo de meteorito.

El gobierno de los Estados Unidos llega al pueblo de Asteroid City trás el avistamiento, y procede a poner en cuarentena a todos los asistentes de la convención durante un periodo indefinido. A partir de aquí la cinta se vuelve un caos lleno de momentos desternillantes, ingeniosos, y sobre todo, filmados con un cuidado más que notable, en la que los jóvenes, junto a sus padres, intentan escapar del cautiverio investigando más a fondo el avistamiento y utilizando numerosos inventos por el camino.

Pero esto no es todo, ¿quién sería yo para recomendar una película (rompiendo las reglas de la práctica) para que la trama se tratara simplemente de esto? Todo lo que os acabo de contar era desde un principio una obra de teatro televisada llamada Asteroid City. La película nos muestra en algunas ocasiones, escenas en blanco y negro, narradas por el increible Bryan Cranston, de la producción de la obra de teatro y los problemas internos de los creadores, creandose una subtrama completamente distinta a lo que estabamos viendo.
Es aquí cuando la película se divide en dos mundos, el primer mundo, la colorida Asteroid City en la que nos reímos con los problemas de los personajes, y la monocroma y triste vida real, en la que nos cautivamos y empatizamos con los protagonistas.

Wes Anderson nos ha enseñado una historia que no es apta para todo el mundo, ya que puede resultar una película confusa, llena de diálogos innecesarios, y unas actuaciones más que escalofriantes para el público convencional que incluso haría parecer que los personajes son demasiado crípticos y repetitivos como para entender sus propósitos, sus sentimientos o directamente lo que les hace especiales. Pero eso es exactamente lo que hace que sea una de las propuestas más originales del año, incluso aún sabiendo que este suele ser el estilo propio del director, nos seguimos sintiendo atraídos y cautivados por la película, es como si estuviéramos consumiendo algo que no entendemos y que podríamos incluso odiar,    pero llega a ser tan adictivo que acabamos queriendo que nunca termine.

Es la primera vez que Wes utiliza un espacio completamente plano y carente de deformaciones en el terreno (pero incluso vaciando el escenario, consigue llenarlo de vida y color) para contarnos una historia desde tal perspectiva, e incluso rompiendo la cuarta pared para contar una obra de teatro utilizando su estilo, el cual también se asemeja a una obra de teatro, con sus escenarios falsos y sus personajes mirando de cara al público. Si eres un fiel seguidor del director, te habrás dado cuenta de esto, y es que se siente como si Wes quisiera aprovechar su propio estilo y exprimirlo para sacar cualquier película, pero incluso haciendo eso, ha conseguido deleitarnos con una historia formidable.

Pero ahora, ¿qué tiene todo esto que ver con los Oscars? Considero que la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas se ha descuidado y ha excluido a Asteroid City en 3 candidaturas, siendo estas: El Oscar al mejor vestuario, el Oscar a mejor dirección de fotografía, y el Oscar a mejor diseño de producción. Y para ser aún más hater voy a propone que películas podría sustituir y explicaré el por qué debería haber sido nominada a tales candidaturas.

Para empezar, considero que Asteroid City podría sustituir a Oppenheimer (2023, Christopher Nolan) en la candidatura de mejor vestuario. Milena Canonero se lució con los atuendos de Asteroid City replicando a la perfección el estilo retro americano de los años 50, añadiendo una paleta de colores completamente nueva e incluso tomando inspiración de películas como Mars Attack! (Tim Burton, 1996). Mientras que Oppenheimer... Seamos sinceros, el 80% del vestuario mostrado en la película se trata de esmóquines o gabardinas monocromáticas.


Por otro lado encontramos el Oscar a mejor dirección de fotografía. Aquí es donde tengo que ser sincero y admitir que añadir una película de Wes Anderson a esta candidatura sería como meter a un bebe en la jaula de un león y preguntarse quien sobreviviría. Sin embargo, tengo mi excusa, y es que Wes Anderson ha utilizado un nuevo tipo de técnica y se ha atrevido a grabar una película en un desierto completamente plano (situado en el municipio madrileño de Chinchón) y carente de estructuras de las que se pudiera aprovechar como ha hecho en el resto de sus obras (sin contar, por supuesto, a Fantastic Mr. Fox [Wes Anderson, 2009] o Isle of Dogs [Wes Anderson, 2018]). Considero que podría sustituir a la decepcionante Maestro (Bradley Cooper, 2023), la cual también creo que no debería estar nominada a ninguna candidatura y que es una película que carece de sentimiento y que resulta incluso ofensivo cuando intenta ilustrar a un maestro como lo fue Leonard Bernstein (compositor de la majestuosa West Side Story [Jerome Robbins y Robert Wise, 1961]) como un simple hombre incel carente de sentimientos y obsesionado con la música que triunfa solo por "haber nacido con un talento". Maestro no tiene ningún momento destacable en su fotografía y creo que ha sido nominado simplemente por estar grabada en blanco y negro y por favoritismo hacia Bradley Cooper.


Finalmente, considero ante todo que Asteroid City debería de haber sido nominada en la candidatura de mejor diseño de producción por encima de Napoleon (Ridley Scott, 2023). Y no quiero que me malinterpreten, disfruté Napoleon y me parece innegable que Ridley Scott puso muchísima atención al detalle y a los escenarios de la película, pero ninguno de esos escenarios esta construido a mano como lo está en Asteroid City, ya que Napoleon aprovecha estructuras reales como castillos y palacios para grabar la mayoría de la película, mientras que todo lo que vemos (la feria, el cráter, el vecindario, etc.) en Asteroid City está construido a mano bajo la supervisión de Adam Stockhausen para replicar a la perfección los Estados Unidos de 1950 y llenar un desierto plano con piedras de cartón y casetas de madera.



Para terminar, aquí está la receta del Galactic Nebula, un brillante cóctel que, aunque no haga justicia a la estética e historia de la película, si que nos recuerda a la escena del alíen por la apariencia verde del coctel y la frescura de este que nos podría hacernos creer que estamos en el espacio:

- 1 1/2 oz de licor de menta verde
- 1 oz de licor de manzana verde
- 1/2 oz de jugo de lima fresco
- 1/2 oz de sirope de azúcar
- Refresco de lima
- Una rodaja de lima



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